Valle del Cauca, Nariño, Chocó, Antioquia y Cauca según el Registro Único de Víctimas son los departamentos que lideran estas cifras. A través de los Decretos Ley 4633, 4634 y 4635 de 2011, la Unidad para las Víctimas trabaja por la garantía de sus derechos tanto colectivos como individuales.
Bogotá, D.C. Hechos victimizantes como desplazamiento forzado (87%), amenaza (4,12%), homicidio (3,97%), actos terroristas, atentados, combates y hostigamiento (1,8%) y pérdida de bienes muebles e inmuebles (1.4%) son los que en su mayoría han afectado a los grupos étnicos en el país en el marco del conflicto armado. Dichos hechos no solo se han presentado de manera individual, sino que han causado afectaciones en el territorio, la identidad cultural y la autonomía y formas de gobierno propio.
En los departamentos de Valle del Cauca, Nariño, Chocó, Antioquia y Cauca es donde más se afectó a la población indígena, Rrom (gitanos) y afrocolombiana (comunidades negras, raizales y palenqueros).
Este doloroso panorama también revela que las mujeres étnicas sufrieron en mayor medida por causa del conflicto armado sumando 52.32% de los casos, mientras que los hombres alcanzaron el 46.71%. Cabe resaltar que, dado el carácter de los territorios colectivos y formas de vida que en él se desarrollan, los sujetos étnicos se han visto despojados de sus derechos territoriales como el control, organización y administración del territorio donde se garantiza la reproducción y transmisión de usos y costumbres, la lengua materna, el gobierno propio, la educación y medicina tradicional, etc.
A su vez, se destaca que las comunidades negras, afrocolombianas, raizales y palenqueras los pueblos y comunidades indígenas y el pueblo Rrom o gitano han sido afectados de manera desproporcionada y diferencial por lo que los procesos de atención, asistencia y reparación deben corresponder a su realidad.
Actualmente, la Unidad para las Víctimas trabaja en los procesos de reparación colectiva de 590 sujetos incluidos en el registro, de los cuales, 350 corresponden a sujetos colectivos étnicos, es decir: organizaciones étnicas; consejos comunitarios y palenques de comunidades negras, afrocolombianas y palenqueras; pueblos, comunidades y resguardos indígenas y al pueblo Rrom.
En el caso de la atención humanitaria para pueblos indígenas en situación de desplazamiento, la Unidad para las Víctimas ha entregado más de 113 mil millones de pesos en 169.138 giros; por su parte en cuanto a comunidades negras, afrocolombianas, raizales y palenqueras, la entidad ha entregado atención humanitaria a más de 204 mil personas; muchas familias en situación de vulnerabilidad reciben atención humanitaria hasta superar esta situación.
La pervivencia física y cultural, clave para la Unidad
A través de las estrategias de atención, asistencia y reparación integral, la Unidad para las Víctimas propende por garantizar los derechos fundamentales de los grupos étnicos de acuerdo con el convenio 169 de la OIT que hace parte de los derechos constitucionales, lo que conllevó a que el Estado reconozca y promueva los derechos de los grupos étnicos en cuanto al territorio, identidad cultural, autonomía, gobierno propio y consulta previa. Es por esto por lo que, al tratar con grupos étnicos, el territorio también es considerado víctima.
