Con un discurso contundente el presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Agentes Logísticos en Comercio Internacional – FITAC, Migue Espinosa, le dio la bienvenida a la versión 25 de nuestro Congreso Internacional de FITAC, FIC – FITAC International Congress, la cita anual para hablar de los retos globales que afronta la industria logística y de comercio exterior.  “Este es un espacio que no solo fortalece nuestra unión como gremio, sino que también nos permite reflexionar, aprender y proyectar el camino a seguir en un entorno que cada día nos desafía más”, afirmó al inicio de su discurso Espinosa.

Las palabras del presidente de FITAC continuaron así:

FITAC hoy congrega a más de 320 organizaciones empresariales a lo largo y ancho del país, desde empresas familiares, hasta grandes multinacionales. Representamos a los artífices del comercio exterior colombiano. El 80 por ciento de las operaciones logísticas colombianas, son gestionadas orgullosamente por nuestros afiliados, depósitos aduaneros, agentes de carga internacional, agentes de aduana, operadores de transporte multimodal, zonas francas, puertos, líneas marítimas, instituciones educativas, empresas de consultoría, importadores y exportadores, entre otros.

Hoy nos convoca un propósito común: enfrentar los retos del presente y prepararnos para los desafíos del futuro en temas clave para nuestro sector como las aduanas, la logística, los puertos y el impacto transformador de la inteligencia artificial en el comercio exterior.

Vivimos en un mundo en constante cambio, en el que la tecnología avanza a pasos agigantados y las dinámicas del comercio exterior exigen de nosotros adaptabilidad, creatividad y, sobre todo, trabajo colaborativo. Las aduanas, como puerta de entrada y salida del comercio internacional, necesitan modernización y eficiencia. La logística, como columna vertebral de nuestras operaciones, debe ajustarse a las exigencias de sostenibilidad y competitividad. Nuestros puertos enfrentan desafíos en infraestructura y conectividad, y la inteligencia artificial, aunque llena de oportunidades, requiere una integración responsable y estratégica.

El cambio climático es una amenaza nunca vista que requiere aún más compromiso por parte de gobiernos, empresas y ciudadanos. En un reciente estudio, la consultora global McKinsey & Company estableció que los países van a tener que pagar el 70% del PIB Mundial para mitigar el impacto global del cambio climático.

La industria del transporte marítimo es una parte vital de la economía global que facilita el comercio internacional y el movimiento de bienes en todo el mundo; no obstante, también tiene un impacto ambiental significativo que requiere una atención urgente. Aproximadamente el 80% del comercio mundial se realiza a través de barcos. Grandes buques cargueros transportan mercancías a largas distancias de manera eficiente, lo que ayuda a mantener la economía global en movimiento. Sin embargo, esta eficiencia viene acompañada de desafíos ambientales considerables. Este será un punto clave en nuestra agenda académica de la mano de expertos y lideres regionales en la materia.

En tierra firme, la industria logística es una de las más contaminantes del planeta. Los consumidores y compañías han empezado a tomar consciencia acerca del uso de embalajes y empaques reciclables, combustibles limpios y movilidad sostenible, particularmente para el transporte terrestre y última milla. De igual forma, diversas investigaciones dan cuenta de que la impresión de documentos y declaraciones en materia de comercio exterior y transporte internacional consume el 2 por ciento en promedio de los bosques a nivel mundial.

Es por ello por lo que no sólo el sector privado sino el sector público debe generar enormes esfuerzos y compromisos para contribuir con la mitigación del impacto en el medio ambiente. Digitalización y sostenibilidad van de la mano, y por supuesto generar una sinergia ganadora: entre mayor uso de tecnología, menor uso de papel y menor presencialidad en las operaciones de comercio exterior.

Ahora quiero abordar un aspecto fundamental para los empresarios del comercio exterior: me refiero al aspecto regulatorio, que sin duda diferencia a los países de mayores índices competitivos, de aquellos que se han rezagado en la carrera por la competitividad. Esa triada fundamental regulación, tecnología y talento humano, cobra aún mayor relevancia para el éxito de las administraciones aduaneras.

Siempre hemos advertido que en materia normativa, lo bueno, si breve, dos veces bueno. No obstante, en algunas ocasiones parece que la consigna fuera completamente lo contrario. Ni bueno, ni breve. Decretos y resoluciones que en vez de aclarar, confunden. Y es que si continuamos sustentando nuestros horizontes normativos con base en la desconfianza, seguiremos viendo como las inversiones, las oportunidades y el progreso migran a otras latitudes.

Ya en el aspecto tecnológico, desprenderse de los sistemas del pasado, sí que nos ha costado trabajo. Por supuesto se reconoce el esfuerzo, pero la modernización de las aduanas debe perseguir fundamentalmente hacer las operaciones más fáciles y eficientes, combatir la ilegalidad, pero sin torpedear a los empresarios de bien. No existe algo más desmotivante para los empresarios que la autoridad castigue de manera desproporcionada los errores formales, muchos de los cuales surgen por la incapacidad de unificar criterios, de poner los sistemas informáticos a punto y de tratar de entender de manera adecuada los múltiples desafíos de la logística, fuera y dentro de las empresas. En particular, consideramos que el concepto de declaraciones anticipadas de carácter obligatorio que vio la luz en Colombia en mayo de este año con el decreto 659 y cuyo proyecto estábamos discutiendo hace exactamente 1 año en este escenario, cobra valor cuando existen incentivos de facilitación y no sancionatorios, como desafortunadamente lo advertimos. Insistimos y seguiremos insistiendo en que el régimen de depósitos es una excelente alternativa, avalada en su momento por la misma entidad. Se ha rechazado esta iniciativa con el argumento de generar una doble declaración, pero estamos seguros de que si estamos superando el reto de la transmisión electrónica de la Declaración Andina de Valor – DAV, muy seguramente en el corto plazo, podremos unificar cuantas declaraciones existan en la operación aduanera, en pro de la facilitación.

Esta triada la cierra el talento humano. Nuestras administraciones aduaneras al tiempo de apostar por el aumento de funcionarios, deben también velar por el fortalecimiento técnico, operativo y ético, así como el acercamiento y la cooperación con el sector privado. FITAC hoy, refrenda su compromiso con el fortalecimiento de capacidades y con el trabajo conjunto con la aduana. Contar hoy en nuestro congreso FITAC con la participación de más de 7 líderes y directivos de administraciones aduaneras de diversos países, es muestra de ello.

No podemos dejar de mencionar, nuestra preocupación por el incremento del contrabando y el lavado de activos, fenómenos interconectados que afectan profundamente el comercio internacional, debilitando economías legales, fomentando la corrupción y financiando actividades ilícitas. Hemos sido testigos a nivel global del incremento del contrabando técnico, el uso de empresas fachada y redes comerciales complejas, la digitalización del comercio ilícito y la evolución del lavado de dinero basado en comercio. Urge refrendar el compromiso del sector público y del privado, para blindar de forma estratégica las actividades de comercio. Infortunadamente, la fragmentación en la cooperación internacional, así como la falta de acuerdos sólidos entre países para rastrear movimientos ilícitos en el comercio transfronterizo, han dificultado esta labor. Aquí resulta fundamental, seguir realizando esfuerzos para estandarizar las regulaciones y los sistemas aduaneros entre distintas naciones, así como afianzar la cooperación público – privada para contrarrestar el preocupante avance de estas tipologías emergentes en nuestra región.

Este congreso es nuestra plataforma para debatir estas realidades, proponer soluciones y construir una visión conjunta que asegure no solo la sostenibilidad de nuestro sector, sino también su liderazgo en el desarrollo económico del país.

Les invito a participar activamente en las sesiones, a compartir sus ideas y experiencias, y a reforzar los lazos que nos unen como gremio. A aprovechar la presencia de colegas y autoridades de todo el mundo y a participar en la primera reunión de campo que FIATA realiza en las Américas.

Al finalizar el discurso gradeció a todos los asistentes por su compromiso, a los conferencistas, a la junta directiva nacional de FITAC, a las juntas directivas regionales, a nuestro equipo de colaboradores en todo el país. “Estoy seguro de que las discusiones que tengamos durante este congreso nos permitirán trazar una hoja de ruta clara y ambiciosa. El futuro de nuestro sector dependerá de la capacidad que tengamos para anticiparnos, innovar y trabajar juntos”, concluyó.

 

Spread the love