En medio del difícil panorama económico que representa el cierre de la vía al Llano para la agroindustria de la palma de aceite, los sobrecostos que enfrenta el sector palmero agudizan más la situación, ya que estos oscilan entre $4.800 y 7.200 millones al mes, aseguró Jens Mesa Dishington, Presidente Ejecutivo de Fedepalma.
Indicó que estos montos se explican teniendo en cuenta que los sobrecostos en los fletes fluctúan entre $80.000 y $120.000 por tonelada dependiendo de la subzona de producción donde esté ubicada la planta de beneficio de fruto de palma de aceite.
“Es decir que los tiempos de entrega del aceite de palma de los Llanos orientales a Bogotá que estaban en alrededor de 6 horas, se han triplicado y actualmente son de 18 horas, afectándose la rotación de vehículos de carga y siendo necesario un mayor número de los mismos para transportar dichos aceites, por lo cual la calidad y la oportunidad en la entrega del producto a los clientes, se está viendo seriamente comprometida”, expuso el dirigente gremial.
Manifestó que la palma de aceite es el primer renglón agrícola en área sembrada del departamento del Meta y el segundo del Casanare, toda vez que la agroindustria palmicultora contribuye con 35 % y 25 % del PIB agropecuario de los departamentos de Meta y Casanare, respectivamente.
En efecto, los Llanos orientales representan 40 % de la producción de aceites de palma del país y produjeron alrededor de 670.000 y 45.000 toneladas de aceites de palma y palmiste en 2018, las cuales se destinan para el mercado local y de exportación, señaló Mesa Dishington.
El promedio mensual del volumen de aceites de palma y palmiste comercializado de los Llanos orientales es de cerca de 56.000 y 3.750 toneladas, respectivamente, que corresponde a alrededor de $125.000 millones y equivale a cerca de 1.870 viajes mensuales.
Capacidad de almacenamiento y propuesta del gremio de vías alternas
En lo que respecta a la capacidad de almacenamiento de aceite de palma en la zona oriental, cabe decir que es de 64.644 toneladas y los inventarios físicos en tanques son de 12.000 toneladas aproximadamente, lo que implica que se está usando actualmente 18,5 % de la capacidad.
Jens Mesa Dishington subrayó que la vía alterna Aguazul-Pajarito-Aquitania-Sogamoso tiene tráfico interrumpido y se requiere mayor fluidez para disminuir tiempos de espera de los carrotanques, así como inversiones que verdaderamente permitan el uso alterno de esta vía en situaciones como la actual.
“Igualmente hay preocupación con el estado del puente de Guacavía entre los municipios de Cumaral y Paretebueno por el tránsito que está teniendo que soportar en la coyuntura”, dijo el vocero del gremio de los palmicultores.
Mesa Dishington terminó señalando que complementario a la vía Aguazul-Pajarito-Aquitania-Sogamoso, que conectaría el centro del país con Villavicencio, es necesario considerar alternativas para la conectividad al interior de los Llanos orientales.
“En este sentido, la vía Puerto Gaitán – La Pollata – Maní – Aguazul se convierte en una necesidad para permitir que la producción del Casanare no tenga que desviarse por Cabuyaro – Villanueva. Esta vía, que actualmente se encuentra pavimentada entre Maní y Aguazul, no solo sería una alternativa frente a los cierres de la vía al Llano, sino que generaría una nueva ruta de salida de los Llanos a distintas regiones del país”, puntualizó.