Por su parte, el ministro de Justicia afirmó que habrá más justicia, es decir, las jurisdicciones indígenas tendrán un piso, una plataforma segura para resolver conflictos de manera pacífica.
Con esta ley se busca fortalecer la autonomía jurisdiccional de los pueblos indígenas respetando sus sistemas de conocimiento propio, desde la palabra de vida, ley de origen, la norma natural, el derecho propio, el derecho mayor; así como establecer medidas que promuevan una articulación idónea y un relacionamiento armónico con las autoridades del Sistema Judicial Nacional, comisarios de familia y defensores de familia.
El artículo 246 de la Constitución reconoce la jurisdicción especial indígena, es decir, que las personas indígenas pueden ser juzgadas bajo sus propias autoridades y sus propios procedimientos.
La firma de la protocolización contó además con la participación de las autoridades indígenas y entidades del Sistema Nacional Judicial.