En el evento se destacó la creación de la Red de Biodiverciudades de América Latina y el Caribe de Centroamérica, la cual fue fundada y promovida desde Barranquilla y que ahora cuenta con más de 20 ciudades integrantes.
Participar en la conversación más importante a nivel global de la lucha contra el cambio climático, la COP28 de las Naciones Unidas, fue posible para el alcalde Jaime Pumarejo Heins gracias al trabajo que se ha venido desarrollando en Barranquilla en la recuperación y protección del medio ambiente y los recursos naturales que por décadas estuvieron en el olvido, en proyectos como la ciénaga de Mallorquín o la playa de Puerto Mocho. Labor que ha sido reconocida y respaldada a nivel internacional por distintas entidades como el Banco Interamericano de Desarrollo -BID-, la CAF, ONU Hábitat, entre otros.
Para el alcalde Jaime Pumarejo Heins este espacio permite, en conjunto con otras ciudades de distintos países, “dar la pelea más importante en Latinoamérica”. “Le recordamos al mundo que nuestro rol no es reducir nuestras emisiones de CO2 porque nosotros, los países más pequeños, no somos grandes emisores. Lo que tenemos que hacer es aprovechar nuestros tesoros naturales y lograr una transición justa que nos permita, al mismo tiempo, desarrollo urbano y cuidar nuestro medioambiente”, manifestó el mandatario distrital.
En ese sentido, Pumarejo Heins precisó que los recursos naturales que existen en los países de Latinoamérica deben servir para cuidar el bosque seco tropical, los cuerpos de agua, los manglares, el Amazonas y los bosques húmedos. “Para eso estamos asociados con ICLEI, con las Naciones Unidas, con el Foro Económico Mundial, con la Agencia Francesa de Desarrollo, con el Banco Interamericano de Desarrollo, con la CAF y muchas otras organizaciones internacionales en la que Barranquilla tiene un asiento y una voz muy importante, porque es vocera en estos temas medioambientales que son el futuro, pero al mismo tiempo nos va a dar la oportunidad de destacarnos en esta escena mundial”, declaró.
El mandatario distrital fue invitado a Dubái por Bloomberg Philanthropies, organización a cargo del Local Climate Action Summit (LCAS) a la COP28, para elevar la voz, junto a varios de sus homólogos, y frente a cientos de líderes climáticos nacionales y subnacionales que buscan, igual que Barranquilla, mejorar la acción global para transformar el financiamiento climático para las ciudades, incorporar la implementación de iniciativas locales en políticas nacionales e internacionales, impulsar la transición energética desde lo local y fortalecer la resiliencia climática y la adaptación a nivel local, temas en los que Barranquilla hoy es pionera en Colombia.
El evento recalcó la relevancia que ofrece el modelo de biodiverciudades a un nuevo paradigma de desarrollo alineado a los compromisos internacionales en materia de desarrollo urbano sostenible, con especial mención a la Red de Biodiverciudades de América Latina y el Caribe de Centroamérica, la cual fue fundada y promovida desde Barranquilla por el alcalde Pumarejo, y que ahora cuenta con más de 20 ciudades integrantes.
Sobre esto, el alcalde enfatizó la relevancia que toma establecer alianzas y redes de gobiernos de ciudades intermedias comprometidas en la lucha contra los efectos del cambio climático y la pérdida global de la biodiversidad, con énfasis en la región Amazónica, y en consonancia con la resolución de las Naciones Unidas sobre Ciudades Biodiversas y Resilientes. Por lo anterior, insistió en el impacto que puede tener en estos escenarios la integración del multilateralismo y los fondos de capital internacional en el financiamiento de esta visión.
El día de Barranquilla en la COP28
Barranquilla fue protagonista en la COP este 5 de diciembre, cuando el alcalde distrital, Jaime Pumarejo Heins, presentó el evento “Barranquilla: la primera biodiverciduad de Latinoamérica – Sumérgete en Mallorquín, una joya para el ecoturismo mundial”. Este fue un evento exclusivo para dialogar sobre Barranquilla como una biodiverciudad latente, con su apuesta más visible, que es el proyecto de Mallorquín.
Allí, el alcalde expuso, ante una audiencia de alto nivel, las fases del proyecto como una apuesta ambiental, social y económica para la ciudad, que busca empezar a posicionar a Barranquilla como un atractivo a nivel mundial en ecoturismo.
Reconocimiento global
Actualmente, Barranquilla es referente en temas de biodiverciudades con el proyecto de Mallorquín, los bosques urbanos y la recuperación de cuerpos de agua, entre otros. Esta gestión ha permitido mostrar el caso de éxito de estos y otros proyectos como Siembra Barranquilla; asimismo, le ha abierto las puertas a la ciudad para hacer parte de las juntas directivas que pretenden cambiar la manera como el mundo manejará los problemas de cambio climático y concientizar sobre el rol de las ciudades en esta gesta.
En ese sentido, Barranquilla integra varias juntas directivas. La primera es con la alcaldesa de París, el alcalde de Río de Janeiro y el economista Jeffry Sacks, para garantizar el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y cómo financiar a las ciudades para que lo logren. Allí la ciudad lidera una de las subcomisiones.
La segunda junta directiva es una en la que la ciudad tiene representación principal para brindar asesoría internacional. Por último, la capital del Atlántico también integra la junta directiva de las Naciones Unidas en su programa de medio ambiente para la restauración de ecosistemas y en la junta directiva de la OCDE para el desarrollo inclusivo.
Con esta presencia, Barranquilla gana un lugar importante en el ecosistema internacional en el que marca pauta para que otras ciudades puedan generar oportunidades de inversión en pro del cuidado ambiental.