A bordo del Buque Gloria, llegaron a Cartagena 12 nuevas piezas de nuestro patrimonio arqueológico recuperadas en Costa Rica.
Con el objetivo de restituir la memoria colectiva de nuestros pueblos originarios, la Cancillería de Colombia ha emprendido bajo el liderazgo del ministro Álvaro Leyva Durán y el Instituto Colombiano de Antropología e Historia – ICANH dirigido por Alhena Caycedo, la tarea de recuperar el patrimonio arqueológico del país que se encuentre en el exterior.
Con estas acciones de diplomacia pública, a través de la Dirección de Asuntos culturales del Ministerio de Relaciones Exteriores, se propone construir una política responsable con el Patrimonio Cultural y los derechos humanos y culturales de las poblaciones originarias de nuestro país. Esta tarea se desarrolla con un criterio común: la optimización de recursos financieros y de infraestructura. Es por esto por lo que durante este gobierno se ha aprovechado algunos de los viajes del presidente al exterior para traer piezas en el avión oficial y lo mismo se ha hecho en algunos viajes de los viceministros de la Cancillería en vuelos comerciales donde han podido traer piezas de pequeños tamaños.
Gracias a una labor articulada entre las Cancillerías de Colombia y Costa Rica, así como de nuestra Embajada en San José, la Armada Nacional colombiana y el servicio de Guardacostas costarricense; el Buque Gloria, trajo a Cartagena 12 nuevos bienes que hacen parte del patrimonio nacional.
La labor que hoy culmina inició su logística el 26 de septiembre. Las piezas fueron embarcadas en el Buque en Limón, Costa Rica y transportadas hasta Cartagena recorriendo aproximadamente 430 millas náuticas durante tres días de navegación. Una vez en Cartagena la Armada de Colombia hizo entrega de las piezas a los representantes de la Cancillería y del Instituto Colombiano de Antropología e Historia, quienes a partir del momento asumirán el cuidado y protección de los elementos.
Se trata de dos guacales con 12 bienes del patrimonio arqueológico. Tales como urnas funerarias, copas, vasijas de carácter ceremonial y utilitario. Estas piezas fueron sacadas irregularmente de su contexto, sin embargo, se puede deducir por algunas características como formas y decoración que algunas proceden, por ejemplo, del actual departamento de Nariño, otra de ellas es una urna funeraria de la cultura San Agustín en el Huila y también una funeraria de forma fálica, de la cultura Calima.
Al respecto, la viceministra de Asuntos Multilaterales de la Cancillería, Elizabeth Taylor Jay, explicó que, se completan un total de 560 piezas pertenecientes al patrimonio arqueológico colombiano que son retornadas a nuestro territorio y resaltó que “estas piezas fueron devueltas de manera voluntaria por la persona que los mantenía en una colección privada”. La alta funcionaria aprovechó el espacio para hacer un llamado para que “quienes tienen piezas arqueológicas, las devuelvan, para hacerle honor a nuestra diversidad cultural”.
Las Embajadas y Consulados en todo el mundo están prestas para recibir y gestionar el retorno a nuestro país de los bienes pertenecientes al patrimonio arqueológico colombiano.